Nature provides some of the best metaphors for life. Take spring. It comes at different times to different latitudes. This reminds us to have compassion for ourselves and others as we grow, personally and spiritually, at our own pace and in our own time. As the weather softens certain flowers start to bloom even though there will still be frosts and possibly snow. These flowers are hardy and prepared to withstand the fluctuating temperatures. Yet they are harbingers of the news that winter is, in fact, coming to an end. We, too, are strong enough to withstand the fluctuating experience of our growth. One minute we know our divinity and the next moment we forget only to remember again. One day we are able to respond with equanimity and love while the next we are back to our old tricks. The good news is that every day we spend awakened, no matter the fluctuations of our ability to stay present, is a harbinger of the joyous spring that is coming. So don’t be afraid to bloom, even if the weather isn’t perfect. Don’t be afraid to claim light, even if you are not always living it. Don’t be afraid to celebrate every moment that you are awake to the Truth of who you are and of Life Itself. Your awakening may come slowly, but it comes as surely as the spring.
La naturaleza provee algunas de las mejores metáforas de la vida. Por ejemplo, la primavera. Esta llega en tiempos diferentes en latitudes diferentes. Esto nos hace recordar el tener compasión por nosotros y por otros a medida que crecemos. Cuando el clima cambia ciertas flores empiezan a florecer así haya heladas y posibilidad de nieve. Estas flores son resistentes y están preparadas para soportar temperaturas fluctuantes. Por supuesto, estas anuncian la noticia de que el invierno está terminando. También nosotros somos lo suficientemente fuertes para resistir experiencias fluctuantes de nuestro crecimiento. En un momento sabemos de nuestra Divinidad y en otro lo olvidamos, pero solo para recordarlo nuevamente. Un día somos capaces de responder con ecuanimidad y amor, mientras otros volvemos a nuestros viejos trucos. La buena noticia a todo esto es que cada día que pasamos alertos, no importando nuestra habilidad de estar en el presente, hay una manera de anunciar que la primavera está por llegar. Así que no tengas miedo a florecer, aunque el clima no sea el perfecto. No temas a decretar luz, asi no siempre vivas en ella. Que no te de miedo el celebrar cada momento que estas despierto a la Verdad de quien tu eres y a la Vida misma. Tu despertar puede que llegue lentamente, pero llega, así como lo hace la primavera.